La violencia psicológica en el ámbito laboral ha tomado fuerza y atenderla es parte del trabajo de los psicólogos en los últimos años debido a las consecuencias emocionales, laborales y familiares que pueden presentarse en las personas que son víctimas de ella.
El término para denominar este tipo de violencia se conoce como “mobbing” proveniente del verbo inglés “mob” (atacar), sin embargo en un espectro más amplio, un ataque puede involucrar diferentes tipos de violencia, física, psicológica y sexual que se encuentran entre las más comunes.
Las víctimas de este tipo de agresiones pueden experimentar culpabilidad y vergüenza debido a que comúnmente no cuentan con la posibilidad de controlar la situación y parar a los generadores de esta agresión.
Se deben cumplir ciertas condiciones para poder definir una situación como “mobbing”:
- Los agresores producen los actos de manera intencionada y con el objetivo de hacer daño a la persona.
- Las agresiones deben ser de manera constante o repetitiva y durante un lapso de tiempo.
Algunas conductas generales que se pueden presentar como agresiones en el ámbito laboral son las siguientes:
- Limitar las posibilidades de comunicación con el equipo de trabajo.
- Evitar la participación intelectual y de convivencia en el ámbito laboral.
- Utilizar apodos o sobrenombres para denominar a una persona.
- Insultar, criticar o humillar a una persona por su desempeño laboral o personal.
- Amenazar o agredir física o sexualmente a la persona.
- Fomentar el desprestigio y desvalorizar el trabajo del otro.
- Asignarle cargas excesivas de trabajo únicamente a esa persona.
En Hominum creamos un espacio terapéutico para el manejo y resolución de los conflictos que pueden generarse como consecuencia de este tipo de actos en el ámbito laboral, ya que pueden presentarse problemas de baja autoestima, desvalorización, estrés, problemas para dormir o incapacidad para la resolución de problemas y toma de decisiones.
Alicia Anahí Pacheco Cruz
Psicoterapeuta de Hominum México